Nota: Esta entrada forma parte de una serie completa sobre el festival Monlam o Año Nuevo Lunar Tibetano realizado en el Monasterio Rongwu, en Repkong, Qinghai, China. Ver la introducción a esta serie de narraciones en la entrada del Blog del 18 de marzo de 2009: "Festival Monlam 2009 (Año Nuevo Tibetano) Día 1: Procesión de la estatua de Buda en el monasterio Niantog."
Día 4Danza-Teatro Cham en el Monasterio Rongwu.
Cuatro días de extraordinarios eventos crean una energía incomparable y también una sed de ver y aprender sobre todo aquello que se ha visto. Los días anteriores me habían servido como una maravillosa introducción para poder presenciar 5 horas de un espectáculo único por el que había ido especialmente a Repkong, la danza-teatro tibetana Cham.
La llamada danza Cham (o danza de los demonios enmascarados) es una representación ritual que se realiza solamente en el budismo tibetano (1), teniendo diferentes versiones de la misma en toda la región tibetana que abarca desde Nepal, Bután y el norte de la India hasta la estepas de Mongolia, pasando por supuesto por todo el llamado Tibet. Le llamo danza-teatro porque posee elementos que reconocemos en occidente como teatrales y dancísticos, aún cuando la tradición religosa tibetana la llame solamente "baile" es un acto que utliza música y movimiento pero además cuenta una historia a través de personajes; en círculos especializados estos actos serían llamados "actos performativos" o "actos representacionales".
La antigua región tibetana de Amdo, hoy Tongren, es una muy respetada región dentro del budismo tibetano y se le tiene muy en alto porque es lugar de nacimiento del actual Dalai Lama (exiliado en Dharamshala); cubre la totalidad de la enorme provincia china de Qinghai, llena de montañas, valles secos y fríos, y con una población totalmente ignorante (a excepción de la población inmigrante china y muy pocos privilegiados), de estracción rural y profundamente religiosa. Es también famosa porque en ella se dieron protestas tan fuertes como en la misma Lahsa en mayo de 2008. La región es puramente tibetana aún cuando esté gobernada por China y sea parte de China.
La danza Cham de Amdo tiene su especial estilo, y no es necesario ser un estudioso para descubrirlo, uno puede ver la misma danza de Bután o Nepal o del Templo Lama de Pekín (2) y las diferencias son evidentes.
El ritual en sí mismo se realiza como el punto culminante de los eventos del año nuevo tibetano (año lunar en Tibet) en el último día de celebraciones, y es representado por un grupo selecto de monjes preparados especialmente para ello. Algunos hablan de transmisión directa de maestro a discípulo de poderes esotéricos a través del baile.
La danza Cham tiene posiblemente un origen chamánico pero se ha convertido en un evento más dentro de una época religiosa importante (en este caso el año nuevo lunar), danza que ya no provoca trance ni en los que la realizan (los monjes) ni en quien la ve, sin embargo sigue siendo de particular importancia religiosa y hoy por hoy, teatral y turística. El pueblo la espera con ansia, y su realización tiene una muy particular estética, comparable con algunas danzas indígenas de origen prehispánico. La evolución a un acto perfomativo o teatral sin embargo parece no haber dado pie a un cambio radical de su estructura para hacerla más accesible o soportable a su público, aún cuando se habla de que el el pasado algunas danzas debieron durar días, hoy por hoy, su duración es aproximadamente de entre 4 y 6 horas, su música es monótona al igual que sus movimientos, y nadie recibe una explicación sobre lo que vió; como en todo en el budismo tibetano todo se explica con el tiempo de práctica y dentro de la vida monástica, nunca al lego.
Diapositivas de La danza-teatro Cham realizada en el monasterio Rongwu. Feb, 2009.
Narración del evento.
Debido al largo de la danza y a la cantidad de material que tengo de ella, he partido mi descripción del evento en cuatro partes y a su vez en cuatro entradas dentro de este Blog, lo que hará un tanto más accesible los detalles que considero importantes de compartir.
Debo repetir, una vez más, que no soy un estudioso de los actos performativos ni de la teatralidad budisto-tibetana y que por lo tanto desconozco en gran parte las estructuras y los porqués de lo que he visto, desde el día que vi esta representación en Repkong he aprendido algo pero no abusaré hablando de más (espero...); sin embargo creo que tengo un ojo teatral afilado y un espíritu aventurero (¡Vamos!, hice un viaje a una región tibetano-china para ver ésto) y ambos me ayudan a transmitir aquello que observé de una singular manera. Ustedes pueden o no seguir mi descripción escrita, es su decisión, pero las fotos y el video (editado en un sentido cronológico de eventos) son el documento en bruto, son la joyas que hay que ver.
Mi consejo entonces es seguir la descripción primero en texto y después ver el video correspondiente a esa primera descripción, y una vez revisado pasar a la siguiente. Sé que ésta y las otras 4 entradas de esta serie no son de una sentada rápida frente a la pantalla, así que promuevo la paciencia y el disfrute lento y pausado.
Primera parte: Preliminares
En la fría mañana del 9 de febrero de 2009 el complejo del monasterio de Rongwu mostraba un delgado pero continuo río de gente que llegaba al último día de celebraciones del nuevo año tibetano; llegando de todas las regiones vecinas, cada uno se postraban tres veces (o más) frente a la gran Buda dorada de enmedio de la enorme plaza de entrada, después seguían su peregrinación por todo el monasterio, realizando sus rezos y entrando y saliendo de cada templo.
A las 10:30 a.m. todo seguía en aquella cama. Dentro de la plaza del templo principal de Rongwu había reunidos unos cuantos grupos de aldeanos y varios monjes adolescentes; cerca de la entrada del templo pude observar una especie de soporte metálico con dos imágenes de esqueletos en movimiento, con los brazos y las piernas muy abiertos, un soporte de aquellos larguísimos cornos tibetanos.
Dentro del templo ya estaban sentados muchos de ellos, esperaban su desayuno ritual, un pedazo de pan duro y té, mientras algunos de los principales realizaban movimientos de preparación para su asamblea. Pudimos entrar al templo y presenciar algunos de esos movimientos rituales: llevar incienso y caminar con él por todos los pasillos, encender una y otra vez velas y cirios en los altares, los novicios aplaudiendo en sentido ritmico, acciones algunas familiares algunas incomprensibles. Contrario a otras veces nos dejaron tomar fotos y algunos chinos imprudentes se metían más allá del pasillo de entrada y como si los monjes fueran objetos a su disposición les tomaban fotos y video.
Como consideraba que esta vez la importancia estaba en los monjes que realizarían la danza, me salí del templo para buscarlos y encontré algunos preparando “el escenario” en el medio de la plaza.
Una estructura triangular con tres lanza-astas con banderolas sobresalían en la parte trasera (o frontal de la plaza), frente a la puerta principal, y en medio de esa estructura triangular había una mesa con tres pequeñas cabezas en cada esquina: una especie de calavera, una pintada de verde y una pintada de rosa, que yo explicaría como los tres estados del cuerpo, uno saludable, otro enfermo y otro muerto. Casi en medio de la plaza había un tablado con una gran imagen pintada de un ser descarnado y en los laterales mirando hacia el exterior varias calaveras.
Cuando preguntaba sobre todo ello al guía, él tan asombrado como yo de observar cada cosa (y tomarles foto), sólo repetía cierta información aprendida de memoria, que la danza era referente a los demonios y que servía como un exorcismo, por eso todo aquello que había ahí nos recordaba a la muerte. Era evidente que eso debió ser en un principio, pero ahora ¿qué? ¿Es sólo un ritual sin mucho sentido para la gente como muchos de los de nuestra iglesia católica, de nuestras fiestas de pueblo, que han perdido su origen y su funcionalidad espiritual? Preguntaba sobre el efecto en la gente, sobre si seguía siendo vigente, pero mi guía, chino de la etnia Han no religioso o investigador, tenía limitaciones para contestarme ciertas preguntas. Es posible, que se hubiera perdido todo sentido ya, o que simplemento el hecho de que los monjes realizaran este exorcismo-danza crearía buenos augurios para el año venidero, como un amuleto;, sin necesidad de ningún tipo extra de partiipación; pareciera que en este acto la gente no reaccionaría tan ferviente como en los otros anteriores: ¿bailarían,? ¿cantarían durante la representación? ¿Gritarían, hablarían con los personajes? Mucha expectación y duda, sanamente me decidí por seguir observando.
El grupo de monjes-bailarines permanecían vestidos con sus típicas túnicas rojas pero esta vez calzaban un tipo especial de zapato: blanco, de piel con motivos de tela en una franja central, con una muy pequeña elevación y con dos pequeños picos elevándose en la punta; un tipo de zapatos que no había visto en ninguno de los otros eventos anteriores.
A diferencia de los otros días los monjes ahora estaban un tanto más preocupados por delimitar el “espacio” mismo de la representación; para ello contaban con un costal de cal y se preguntaban sobre las dimensiones exactas de la plaza para realizar un círculo, de hecho para realizar dos. Una vez dibujados los círculos con la cal, la gente pudo ubicarse para sentarse fuera de ellos y quedarse ahí hasta la hora de la representación. Los monjes pintaron además una serie de cuadros al pie de las escaleras que llevan al templo principal (lo que denominaríamos el escenario) y que parecía ubicaban lugares para cada uno de los personajes que participarían en la danza.
Salieron dos monjes del templo (dentro seguían en rezos) llevando una estructura tipo pirámide de madera que en la punta tenía una calavera muy bien definida y una especie de moños de tela como orejas (o alas) y una llama en su cabeza, como si fuera una “muerte iluminada” o "la espiriutalidad de la muerte". Depositaron la estructura sobre la mesa de las tres cabezas y regresaron al templo.
Monjes depositando un pirámide con calavera dentro la espacio de la danza Cham. Monasterio Rongwu. 9/feb/2009.
Los cornos ubicados sobre el techo del templo principal comenzaron a sonar y una gran algarabía en los espectadores se dejó sentir, parecía que la danza iba a comenzar.
Video 1: Preliminares de la presentación de la danza-teatro Cham. Rongwu. Feb, 2009.
(Part 1) Tibetan Cham Dance Performance at Rongwu Monastery: Preliminaries. from Gustavo Thomas on Vimeo.
(Part 1) Tibetan Cham Dance Performance at Rongwu Monastery: Preliminaries. from Gustavo Thomas on Vimeo.
(1) No hay que confundir el nombre Cham con otras danzas denominadas igual por una coincidencia de sonido, y debido a la transcripción a nuestro alfabeto de la palabra tibetana. Algunos para diferenciarla la llaman Tcham.
(2) Se pueden encontrar varios video de la misma danza en Youtube o buscando en Google. Es mejor en la búsqueda agregar a "Cham dance" la palabra "tibetan' or "budist". La b´suqueda en español puede ser muy limitada en resultados pero también funciona.
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